miércoles, 7 de abril de 2010

LUCÍA, Primer cuento, tiene un Plus

“LUCÍA”, su primer cuento tiene hoy día un buen Plus.
J.Pucheux.

Yo nací en el barrio que tiene la llave, en el Cerro, en la esquina de la calle Patria y la propia Calzada del Cerro, justo frente a la entonces muy conocida fábrica de Zapatos Bulnes. Mamá me tuvo a una cuadra y media de allí, en una casa quinta convertida en Hospital, La Asociación cubana de beneficencia, donde según me contó después, le habían realizado un horrible parto, lo cual le hizo olvidarse de volver a procrear. De ahí mi cariño profundo por todos mis primos hermanos, a los cuales desde niño los consideré mis hermanos de sangre, linda manera de paliar mi triste soledad. Allí en esa esquina de Patria y calzada del Cerro, tenían mi abuelo y mi padre su farmacia, en una antigua casa quinta de unos marqueses que posteriormente había sido también una escuela. Abuelo se la había comprado a sus directores, creo que se llamaba Colegio Academia Pítman, mucho antes de que esta se trasladara a la esquina de la Calzada y la calle de Consejero Arango. Al frente abuelo había adaptado la Casona en una farmacia y la vivienda de todos detrás. Justo al lado nuestro estaba otra gran casa quinta, aun mucho más grande, que había pertenecido en los Siglo 18 y 19, creo que los Condes de Ayestarán. Cuando mi familia compró esa propiedad en esa esquina, entonces vivía allí la familia de Ana Roca, recuerdo aquella casa, se decoración casi intacta de aquellos siglos, sus vitrales, sus muebles , sobre todo , su colección de platos de todas las familias aristocráticas de la Habana, incluyendo una vajilla que les había sido regalada por el Rey Alfonso XII de España. En esa casona, con lugares mágicos por doquier, jugábamos todos los días, con Kuqui , la niña de la casa, una verdadera princesita, así como con los amiguitos del callejón de la esquina.
LLegué a conocer bien aquella casona.
Ya trabajando en el ICAIC, me entero un buen día que se preparaba una filmación en esa Casona.
Era la filmación de unas escenas del primer cuento del filme LUCÍA del querido Humberto, durante varios días estuvieron rodando, yo no me perdía ni un plano, claro vivía al lado, además de todos modos, seguramente iba a tener que trabajar algo en la Post filmación, que mejor estar allí viéndolo todo, pues así mi trabajo podría ser aun mucho más efectivo, no sucedió así, pues Humberto nunca se decidió por hacerle trabajos en la Truca.
Humberto y Nelson , cada vez que nos reuníamos para ver en cualquiera de sus filmes, algo que tuviera que ver con la Truca, los créditos, por ejemplo, salía a la luz una realidad indiscutible, realmente , casi nunca , sus películas necesitaban de efectos visuales , cada plano estaba donde era necesario, cada encuadre hablaba solo, cada corte era el que era.
Esto caracterizó su cine. Creo que solo algunos filmes tienen trabajos de Truca. Aprender dónde va un efecto, por qué, cuándo, para qué, es un don de sabiduría y de comprensión del lenguaje cinematográfico. Humberto y Nelson lo sabían bien. Yo aprendí también.
LUCÍA es hoy un clásico, nadie lo duda, es un gran filme, solo que hoy, tiene un Plus, el haber dejado para la historia, en bellas imágenes, cómo era aquella Casona. Hoy, ya no existe, nadie se ocupó de repararla, de seguir brindándole vida, la casa murió lentamente, pasó de edificio majestuoso a ser un solar, para terminar en Ruinas.
Gracias a LUCÍA podremos saber de ella.
Ese es el Plus del que hablo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario