viernes, 15 de abril de 2011

A propósito de un Post de Juan Antonio Borrero

Hoy he recibido un Post de mi amigo Juan Antonio Borrero en el que escribe sobre los jóvenes realizadores de audiovisuales de Cuba. A partir de la importancia del texto y su universalidad lo he querido subir a mi Blog.

Todo lo que Borrero expresa, su preocupación por el futuro del cine y de los jóvenes realizadores es un tema que se repite a lo largo y ancho de nuestro Continente, de ahí su importancia,

No existen fronteras, lo que Borrero expresa no es un caso solo de Cuba , lo es también de otras tierras no muy lejanas.

A continuación el Post de mi amigo.


PENSANDO EN VOZ ALTA

Juan Antonio García Borrero.

En nuestros actuales métodos de enseñanza del audiovisual, el afán por el dominio de lo técnico, ha terminado por relegar a un último plano todo lo que tenga que ver con las funciones del cineasta como intelectual en la esfera pública.

Eso ha traído como consecuencia que ya nos parezca natural de que un realizador de audiovisuales no tenga que preocuparse por concederle a su obra, el respaldo de un conocimiento histórico de sus orígenes. Pareciera que basta con estar actualizado en el uso de las tecnologías más modernas para sentirse moderno, y de manera mecánica, capacitado para ejercer una “crítica social” que no importa que sea tan efímera como ineficaz, por carecer de fundamentos profundos, en tanto lo que predomina es la catarsis.

Puedo entender la profunda fobia que sienten algunos de nuestros jóvenes o contemporáneos, a sumergirse en la lectura e interpretación crítica de esos procesos que han dado lugar a la cultura cubana en su estado actual. Ha existido mucha torpeza por parte de quienes debíamos haber contribuido al mejor conocimiento de esos fenómenos, lo cual explica por qué hasta hace poco el término “quinquenio gris” era desconocido para buena parte de esos realizadores noveles.

Mi pregunta: a estos jóvenes hemos querido enseñarles a ver lo más destacado del cine internacional, a escribir guiones, a mover la cámara, a editar, a trabajar con tecnología de punta, pero, ¿nos hemos preocupado de enseñarles todo lo que se ha pensado y discutido en nuestro país, alrededor del cine como expresión artística e ideológica?